Historias con moraleja

Siempre me gustaron, ya he hablado de ello. Pero me gusta repetirme con un toque distinto, que diria el chojin.

Me gustan las historias que enseñan. durante cierto tiempo de mi vida consumi muchisima literatura que consideraba no enseñaba demasiado. Pero con el paso del tiempo me he dado cuenta de que, exactamente igual que ocurre con las personas, pocas historias te dejan igual que estabas antes de leerlas.

Es cierto que hay libros aburridos, repetitivos o estresantes, y tambien los hay mas construidos y peor finalizados. No hay cosa que mas me moleste (quizas si ;) que un libro que va muy bien y acaba fatal. No porque el final sea predecible, sino porque promete mucho y al final te decepciona con un final flojo, insulso, sin conviccion ni resultado. Cuando el final de un libro (o cuando conoces el fondo de una persona) te demuestra que todo lo anterior fue simple seduccion y que no hay una finalizacion seria, comprometida, coherente, se te queda cara de tonto. Es como si no te merecieses haber perdido el tiempo durante el recorrido, has acompañado al autor y te has creido la historia, y al final..

...al final te quedas sin moraleja.

Por eso me encantan. Las moralejas, o los restos de sabiduria que te dejan ciertas personas, son siempre un buen regalo de despedida. Y considero que muchas historias en nuestras vidas estan marcadas como eternas, cuando en realidad deberiamos quizas verlas como novelas en si mismas, con principio y final. Si cada etapa pudieramos cerrarla con una moraleja, si cada persona que conocemos nos transmitiese alguna enseñanza visible (positiva o negativa, todo vale para aprender!!), sentiriamos el progreso y la evolucion que eso conlleva.

Cuando era pequeño lei muchos libros de Julio Verne. Ese gran autor, de magnifica y preclara inteligencia, fue precursor de tantas realidades que es asombroso como encajaron sus historias (todas con moralejas, cientos de ellas) con el desarrollo posterior de la raza humana. De sus historias saque muchos valores en claro, porque el ejemplo que sus personajes desarrollan en propia carne de como convertir un valor en realidad era tan visible que no podias esquivarlo.

Leyendo la isla misteriosa me apasione con el personaje del ingeniero (Cyrus Smith, gracias, google!, esa memoria del universo organizada, no como la mia!!), capaz de simplemente usando la logica y sus conocimientos, proveer de practicamente todo lo imaginable para una vida moderna y comoda a los habitantes naufragos compañeros suyos. Era un lider, un amigo, un constante impulso, y la personificacion de la etica y la constancia. Creo que me enamore de la ciencia y sus avances leyendo como el ingeniero resolvia cada problema que se le planteaba con teson, serenidad y paciencia.

En ese y otros libros, la figura de el Capitan Nemo tambien fue un gran referente. Y su moraleja es impactante por lo certera. Su defensa de la naturaleza a ultranza, la sensacion de impotencia y soledad ante la avaricia humana que destilaban sus actos y pensamientos escritos, la tristeza que emanaba de las descripciones de como el hombre saquea una naturaleza que cree de su propiedad y simplemente destruye sin considerar ningun futuro, para mi fue una referencia que luego el ecologismo ha tratado de multiplicar sin mucho exito.

De otros autores como Mark Twain aprendi valores como la amistad, que tan dificil es ver reflejada en el mundo real, porque pocos somos capaces de mantener la ingenuidad necesaria para que sea autentica, sincera, eterna y entregada. Yo hubiera dado cualquier cosa por tener a un huckleberry finn a mi lado. Y tambien hubiera dado cualquier cosa por vivir la moraleja de la escena en la que tom sawyer asiste a su propio entierro.

Todas estas moralejas me han ayudado en mi vida, pues suponen un criterio comparativo excelente para medir las realidades que nos vamos encontrando. Sigo buscando moralejas en todo lo que cae en mis manos. Y desde hace muchos años trato de centrarme en historias de las que pueda aprender. Los pequeños cuentos antiguos, de culturas asiaticas, estan tan llenos de moralejas que algunos lo son desde la primera palabra a la ultima. Especialmente las historias zen, son tan increibles que escapan a nuestro raciocinio. Simplemente encierran sabiduria destilada, inherente, palpable y sin embargo perpendicular a cualquier analisis.

Las personas con moraleja tambien me han cautivado siempre. Son esas que cuando te hablan, aunque ellas mismas no lo sepan, te estan enseñando algo. Son esas que te dicen lo que ya sabes, que te lo recuerdan quizas, que te sacan de dentro tu propia verdad escondida en las entrañas. Que es posible que desaparezcan o no de tu vida, pero que son puntos de inflexion. Antes de ellas, eras tu mismo. Pero despues de ellas, despues de esa historia que te traen, de ese momento en que la vida se te revela, el ojo se abre, y renaces porque necesitabas quitarte un peso que nisiquiera eras capaz de entender como algo ajeno, obligado por los demas, inculcado sin fundamento ni cariño, apropiado como coraza o como refugio, como escudo o como espada, y que creias tan integrado en tu esencia que jamas te hubieras pensado capaz de vivir sin el.

Y de repente una simple historia cambia tu vida. Una simple persona dice la palabra que llega, el significado que pierde la semantica y se convierte en hecho, no en forma, no en concepto, no en teoria.

Las moralejas y las personas que han cambiado mi vida siempre lo han hecho para bien. Siempre han significado crecer, cambiar de piel y hasta de personalidad. Y lo mejor de todo es que ninguna de ellas me forzo, me obligo o me engaño para hacerlo. Simplemente me recordaron que dentro de mi tengo las preguntas correctas. Y que cuando las descubro y las formulo, cuando dejo de buscar respuestas porque en realidad no hacen falta, entonces no es necesario decir mas. Simplemente el cambio se produce.

Deseo de corazon que busqueis las moralejas de todas las historias, de todas las personas, de todas las fases de vuestra vida. Y se que sera para bien.