Somos como queremos ser. Esta afirmacion me gusta ponerla en duda, rebatirla y ganarme a mi mismo en cada argumentacion. Y luego comenzar el proceso contrario, hasta demostrar que efectivamente somos como queremos ser.
Esta eterna partida de ajedrez encierra grandes ventajas. Posicionarse permanentemente en un lugar de asedio, tratar de defender con argumentos solidos una postura, y mas adelante tratar de defender la opuesta, amplia mucho la capacidad de vision sobre el tablero de juego. Y al final llegas a las preguntas que merecen la pena.
Cuando defiendo esa frase, me ataco con argumentos muy sencillos y aparentemente demoledores, de sentido comun. Si fueramos como queremos ser, seriamos mucho mejor que lo que demostramos. Pero el mundo a su vez, demuestra a diario que una gran mayoria de las personas que realmente PUEDEN DECIDIR como ser, se dedican no a ser mejores personas o averiguar como narices se consigue eso, sino a OLVIDARSE de que hay una gran mayoria mucho mas abrumadora de personas que no es que puedan decidir ser de una forma u otra, es que sus opciones se reducen a seguir luchando cada dia por seguir existiendo, o rendirse y dejarse morir simplemente. Y que la gente que puede decidir como ser, que puede elegirlo porque ha tenido la inmensa suerte de nacer en un entorno privilegiado, en el que aunque te metan en una carcel sigues recibiendo comida y cobijo, siga decidiendo ser como es, me parece demasiado cruel con mis esperanzas sobre el ser humano. Y al final me acabo rindiendo y aceptando que no somos como queremos ser.
Entonces, con la esperanza perdida y la balanza a favor de asumir que las fuerzas externas nos secan el cerebro y no nos permiten elegir, ante el horror alternativo de admitir que la gente simplemente se mira el ombligo cada dia y lo ve mas y mas grande y lo que ocurre en la tele mas y mas lejos, cambiar de idea no me parece tan buena idea. Hay muchisima gente que simplemente NO SABE lo que ha de hacer para elegir como ser. Le han dicho, si, como pertenecer a determinada casta, raza, religion, ideologia o cultura. Le han explicado y tratado de inculcar determinados valores, determinadas fobias y rutinas, determinados tics y extravagancias para definir a que tribu pertenece. Incluso ha intentado cambiar de aires y es muy posible que visitar culturas tan ajenas como sus propios vecinos del piso de al lado les haya hecho sentir que abrian sus mentes a espacios libres de condicionamientos en los que sus espiritus encontraban ese eslabon perdido con el buen salvaje que se supone nos hace retroceder a un pasado mas equilibrado y natural.
Pero lo cierto es que todos esos viajes astrales, fisicos o metafisicos, todas esas creencias de unidad con los yanomami de las selvas amazonicas, con los extraterrestres o los santones, con los gurus o con las sectas refinadas, no hace a ninguno de esos seres humanos, autoctonos o turistas, mas cercanos ni menos condicionados. Seas como seas y de donde seas, ser humano significa que tienes la CAPACIDAD pero no la SABIDURIA INNATA que te permite elegir como quieres ser.
Es una mentira muy bien disimulada nuestra capacidad de eleccion. Los que manejan la sarten estan muy interesados en vernos saltar de una a otra. Pero el mango lo siguen teniendo ellos mientras no rechacemos cualquier sarten en la que nos quieran asar mediante el fuego de la culpa.
El unico remedio que he encontrado ante tanto desatino es un sano escepticismo vital, constante y alegre, que no reniegue del ser humano sino que lo mire desde la perspectiva de un benevolo abuelo que observa como su nieto se empeña en coger lagartijas mas grandes que sus manos, sabiendo que le pueden dejar sin dedos. Eso mismo hacia mi abuelo conmigo. Pero me avisaba, a pesar de dejarme que corriera tras lagartijas imposibles de capturar, de rabo eyectable y velocidad vertiginosa sobre las piedras de mi Zamora de la infancia.
Ese escepticismo me dice que podemos elegir despertarnos, pero que es muy raro que nos lo tomemos realmente en serio. En el fondo nos resulta mas comodo y menos traumatico manejar nuestras pequeñas miserias que afrontar problemas para los que no nos consideramos en el fondo parte de ninguna solucion, y si de bastante porcentaje del problema.
Elevamos nuestro nivel de vida, y todo lo que queda por debajo de el se convierte en invisible. Dejamos de considerar comida todo aquello que no este envasado, etiquetado, controlado, precintado y supervisado. Dejamos de considerar "sano" ducharnos menos de una vez al dia. Nos sentimos mal con nuestro propio olor y gastamos miles de millones en cosmeticos para disimularlo. Pasamos a contrastar nuestro peso con el de modelos que pasan casi tanta hambre como los que no pueden elegir que talla tendran cuando dejen de necesitar alimentos definitivamente. Seleccionamos a nuestras parejas por su nivel economico, su exito social o su fisico acorde con la inversion que hemos realizado en nuestra vida. Seleccionamos nuestras diversiones segun el grado de alejamiento con la realidad que consiguen provocarnos. Mantenemos un estatus mental permanente que nos deprime si perdemos. Y agradecemos muy rara vez tener la oportunidad de ver un nuevo, aburrido o deprimente dia, en el que comemos lo que queremos porque lo podemos elegir, andamos por donde queremos porque nadie amenaza nuestra vida, y podemos beber toda el agua que queramos sin sentirnos privilegiados.
Decidir como queremos ser pasa por un proceso de filtrado de todo lo que nos encumbra y nos hace sentir importantes. Todo eso que consideramos que nos merecemos, que es obligatorio para nuestra salud fisica, mental, psicologica. Todo eso simplemente es una fantasia. Un cuento que nos contaron de pequeños y nos tragamos hasta el final. Una moraleja mal enseñada, peor aprendida y tristemente fijada en nuestro cerebro como un bien objetivo y universal. Nada de lo que nos hace mas ricos, mas guapos o mas inteligentes nos permite aprovechar mejor la vida que lo que lo pueda hacer cualquier analfabeto ignorante y que viva en la inanicion de cualquier pais subdesarrollado de esos que se ven por la tele desde nuestro sofa. En realidad no somos mejores personas que ellos, ni mucho menos. Unicamente somos mas capaces de ignorarles que ellos a nosotros. Y de hecho muchos de esos que mueren de hambre habran conocido mas dias felices en compañia de personas que realmente les aman que los autoengañados poseedores de la riqueza mal empleada que somos los del primer mundo. La calidad de las personas no la define su entorno, ni su estatus. Solo el nivel de sus relaciones es lo que determina esa calidad.
Yo no creo que haya malos maestros, por definicion. Y los alumnos, por definicion tambien, no pueden ser buenos ni malos a priori, dependen de como se les incentive a ser una u otra cosa. Y de los ejemplos que vean y estimen les vayan a beneficiar mas en el futuro. Pero si que estoy en desacuerdo con los contenidos en general de la educacion. Hay un desproposito increible al priorizar en exclusiva la preparacion teorica y tecnica que nos convierte en ingenieros muy capaces, pero absolutamente incapaces de gestionar su vida emocional. Llevo toda mi vida estudiando por libre al ser humano, con el humilde objetivo de conocerme mejor a mi mismo y los porques que me quitan el sueño como a todo el mundo. Y excepto contadas y honrosas excepciones, a mi alrededor esa preocupacion humanista se considera poco menos que extravagante, cuando no directamente una perdida de tiempo. Para que preocuparte de los motivos, si lo que importa son los resultados.
Con semejante alejamiento de la preocupacion por los porques y la desmedida ambicion por conocer el que, el como y sobre todo el cuanto, no es de extrañar que la depresion gane adeptos por minutos, que la obesidad desplace como enfermedad a cualquier otra en el ranking de peligros para el ser humano moderno y que destrocemos alegremente el planeta en aras de un mercado economico mas boyante y con mas beneficios.
La gente se preocupa mas de que la disminucion en la venta de coches frene el consumo que de averiguar si realmente les hace falta un coche para ser felices. De tener una segunda casa que de disfrutar adecuadamente de la primera. De conseguir un yate de lujo aunque solo sea para unas vacaciones que de elegir adecuadamente con quien compartir un simple paseo por el parque. De una bajada de las pensiones o una reduccion de sueldo que de averiguar si necesitan realmente todos los lujos que la vida moderna les ofrece a cambio de un modico precio.
Desde hace algunos años se oyen voces de alerta al respecto de una caida de los sistemas, sobreexplotados y hinchados por la especulacion inmobiliaria, los abusos laborales, la fuga de capitales y la proteccion de los derechos de los poderosos a costa de los deberes impuestos a los que son oprimidos por ellos para que puedan seguir llevando vidas de lujo, en las que tambien se deprimen y suicidan mas que en ninguna otra casta social. Yo no lo veo tan negro, pero si veo un retroceso necesario y proximo a nosotros.
Ese retroceso no implica una vuelta a las cavernas, ni una desaparicion de clases. Me gustaria pensar que en realidad hay gente para todo. Hay personas a las que les gusta el ajetreo de una bolsa de valores, y manejan bien la adrenalina del broker. Hay otras que disfrutan en el mar y les gusta pescar como medio de vida. Algunos aman la soledad y tranquilidad de la montaña, otros el bullicio de las costas en verano. Hay quien no ha pisado jamas una discoteca, y quien no concibe salir de fiesta sin pasar su tiempo bailando en una. Hay de todo, y por tanto, hay vida para todos los gustos. Si solo las personas dieran un pequeño paso atras, y ELIGIERAN como quieren comenzar a ser a partir de ese pequeño retroceso...
Pero veo un grave problema para conseguir esa meta, ese elevado sueño. Nos faltan ejemplos. Y los griegos o los filosofos contemporaneos ya no nos valen. Mas nos valdria que un Andy Roddick (famoso tenista) o un Iker Casillas (famoso portero de futbol) o Pastora (famosa cantante, y si no lo es deberia serlo) eligiesen machacar a todos los periodistas que les entrevistasen con citas filosoficas.
En estados unidos el programa de Oprah Winfrey (famosa entertainer) consigue mas lecturas de un libro seleccionado por ella que veinte años de buenas criticas en revistas especializadas.
En españa hasta hace nada (y de hecho sigue ocurriendo asi) a los que veian los documentales de la 2 los denostaban por aburridos (y luego preguntaban que significa denostar, por supuesto).
Pero el resto del mundo es mas o menos igual. Los ejemplos religiosos ya no valen de nada. No existe una espiritualidad que permita sentir que un ejemplo vale la pena. En su lugar, la teologia se sigue dedicando a darse autobombo y aumentar el desconcierto general y la fuga del paraiso en este o cualquier universo posibles.
Y sin ejemplos que seguir, la maquinaria economica seguira consumiendo nuestros cerebros hasta que entremos en barrena y nos estrellemos como Icaros con sobredosis de red bull. Solo espero que la caida sea para algunos sobre espuma. Y que todos nos demos cuenta de que caerse es el mejor entrenamiento para aprender a levantarse de una buena vez.
Esta noche espero soñar con mi abuelo, que ya murio, y me de algun buen ejemplo mas. Al menos eso me gustaria. Y si pueden aparecer en ese sueño las personas y personitas que conozco que tambien son grandes ejemplos de teson y ganas de superarse que conozco, seria estupendo. Ojala pudiera reunirlos en la vida real tanto como en mi imaginacion. Pero es ya suficientemente bueno que todos ellos confluyan en mi.
Asi que os agradezco a todos vosotros, que ya sabeis quien sois, vuestro ejemplo y perseverancia. Estoy aprendiendo a hacer de nuevo mi cama cada mañana. Y eso es, claramente, solo un pequeño ejemplo. Ojala cada nuevo dia me traiga todo lo bueno que tuve hoy. Y que cada dia repita esa frase hasta que sea un habito tan facil como respirar sin pensar.
Y ahora inspiremos juntos, hagamonos conscientes de que solo somos el pequeño espacio de tiempo en el que retenemos el aire dentro, y soltemos todo lo negativo con la siguiente exhalacion. Con ese deseo para todos vosotros, amiguitos y amiguitas, y algun hada que debe estar durmiendo ya a esta hora, custodiada por sus guardianes de afiladas uñas, me despido por hoy. Hasta pronto.
